Con un excelente marco en las dos convocatorias, la especialista en programas de formación de formadores, Inés Sanguinetti, brindó una capacitación sobre herramientas lúdico-pedagógicas y de animación sociocultural a los docentes de los Talleres Culturales de la Municipalidad de Puerto Madryn y la conferencia gratuita “Arte y Creatividad en la Escuela y Comunidad” en la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco.
Las actividades, vinculadas con educación formal y no formal, tuvieron lugar durante el fin de semana y contaron con el auspicio de la empresa Aluar y del Hotel Yene Hue. Fue uno de los eventos más importantes de este año en la ciudad de Puerto Madryn, organizado por la Secretaría de Ciencia, Educación y Cultura de la Comuna en el marco del Programa de Fortalecimiento y Desarrollo de las Organizaciones de la Sociedad Civil.
Esta propuesta integra el arte y la creatividad en forma transversal a los contenidos curriculares para la mejora de la convivencia, la cohesión social, la calidad escolar en sentido extendido y la ciudadanía efectiva. Su objetivo es fortalecer la arquitectura social de los espacios comunitarios (escuelas, organizaciones sociales, grupos comunitarios y centros de salud) a través de una capacitación en herramientas lúdico-creativas y de animación sociocultural. Inés Sanguinetti es una de las personas más importantes de Latinoamérica en el tratamiento de estas temáticas, que tienen que ver con la transformación social a través del arte.
FORMACIÓN PARA DOCENTES DEL MUNICIPIO
Otra de las actividades desarrolladas por Sanguinetti en Puerto Madryn fue un taller de formación en herramientas lúdico-pedagógicas y de animación sociocultural, dirigido a los docentes de los Talleres Culturales de la Municipalidad. El objetivo fue brindar a los docentes instrumentos que permitan fortalecer el trabajo social y territorial que realizan a diario en cada uno de los barrios de la ciudad.
CREAR VALE LA PENA
Durante sus intervenciones, la disertante se preguntó: “¿Y si pudiéramos pensar en la educación como una larga conversación?, ¿y si enseñar fuera hacer señas que marquen rumbos y sentidos donde no los hay?, ¿qué conversación queremos instalar en nuestros espacios educativos?. Lo único que tenemos asegurado por delante es un mundo de incertidumbre social y ambiental, y una realidad cada vez más violenta a raíz de un mundo cada vez más inequitativo”.
Seguidamente, Sanguinetti sostuvo: “Si el proceso global planetario no está garantizando horizontes de progreso certeros, ¿qué tenemos para ofrecer como formadores de nuestros jóvenes?, Un aula o un taller o cualquier espacio que reúna personas parece algo demasiado restringido, sin embargo, hay un proyecto social posible en nuestras manos dentro del ‘convivio’ que reúne lo humano”.
En tal sentido, expresó que cada aula es potencialmente un mundo muy transformador. “El programa “Arte, Bienestar y Creatividad en la Comunidad” (ABC) es una estrategia de fortalecimiento y puesta en red de esos espacios entre la escuela y la comunidad. Se ocupa de transformar la práctica docente desde la idea de que la motivación genera curiosidad, esta fortalece la creatividad y la capacidad entonces de innovar, que vuelve entonces a generar motivación por más conocimiento e interacción con otros. ¡La pasión de descubrir, aprender y crear juntos! La estrategia es simple: se trata de poner uno o dos artistas comunitarios por escuela a trabajar con todos los docentes y materias en la facilitación del medio para el aprendizaje y en la mejora de la convivencia”, afirmó.
Este laboratorio de innovación, actuó en dos sentidos: transformar la escuela y transformar la forma en que se diseñan e implementan políticas públicas articulando cultura y educación para producir una alfabetización para el buen vivir. ABC se desarrolló durante 4 años en 20 escuelas públicas de la ciudad de Buenos Aires en conjunto con el Ministerio de Educación y el de Innovación y Tecnología de CABA y es una puesta en práctica de las Metas Educativas 2021 de la OEI.
La especialista añadió: “Creemos que el respeto por la diversidad se educa y se logra desde la experiencia de la diversidad como disfrute, curiosidad y motivación. La diferencia debe dejar de ser amenaza para ser potencia. Re-encantar el aula, la escuela y el barrio desde la empatía, donde los pequeños gestos nos lleven hacia las grandes transformaciones es una posibilidad de retomar un camino de búsqueda de la felicidad como algo posible, como tarea de la escuela, de la comunidad y también de la democracia. Necesitamos generar un futuro de bienestar desde un presente creativo. Sin aire sobrevivimos sólo minutos, sin agua sólo días, sin comida sólo meses. Sin ideas podemos sobrevivir toda la vida”.
Para finalizar, la responsable de la Fundación “Crear vale la Pena”, afirmó: “El ABC es un llamado a poner ya en un mismo mapa de acción todas las prácticas artetransformadoras que están actualmente a la intemperie en las escuelas y los barrios. Reconozcámoslas, hagámoslas crecer, pongámoslas en red y aceleremos ese cambio”.